jueves, 27 de diciembre de 2007

Como bueyes

¡Atención, damas y caballeros! Tengo el honor de presentar un proyecto que hice junto a mi amigazo Guillermo Ruibal. El mismo consiste en un blog y se llama Como bueyes.

En él vamos a dar nuestras opiniones sobre distintos temas, como buenos hijos de Ned Flanders y María Leal que somos, comprometidos con los que consideramos valores justos y de buena hermandad.

Como verán, si entran, nos dedicamos con ahínco al blog, tanto que hasta le pusimos un título con imagen y unas fotos acompañando los nombres de las secciones, cosas que jamás se vieron en otros blogs.

No me queda más que pedirle, por favor, al que lea esta entrada, que le de una oportunidad a Como bueyes.

Saluda con amor (?),
Kluivert

viernes, 21 de diciembre de 2007

Quien huye y te abandona, no es tu amigo

Hace un par de días, encontré algo en mi casa que me conmovió.

Resulta que estaba frente a la biblioteca --lugar que, lo confieso, no visito con frecuencia-- buscando algo para leer mientras hacía tiempo, y entre los cientos de libros que hay ahí, vi dos joyas, dos tesoros de mi infancia: dos libros que formaban parte de la Biblioteca Temática Educacional Anteojito.

Eran los tomos 21 y 22 de esa colección y estaban dedicados a la recopilación de fábulas con moraleja.

Mientras escribo esta entrada, tengo al número 22 a un costado. En la primera hoja aclara: "Este ejemplar integra la edición número 1.169 de revista Anteojito de 13 de agosto de 1.987".

A continuación pego la imagen del libro; tal vez alguien lo haya leído de chico y, mirándolo, pueda vivir un grato momento, como me pasa a mí cada vez que lo miro.




Me despertó muchas sensaciones abrirlo y notar que recordaba las fábulas y sus moralejas, los personajes y las ilustraciones. Todo. Y ni hablar de lo emocionante que fue volver a leerlo, después de más de quince años. No pude evitar pensar en lo loco, extraño, maravilloso que es que estaba leyendo algo que leí de nene. Es una estupidez, lo sé, pero es lo que sentí, como que me resultó mágico que el joven que soy ahora, tenga en sus manos y lea algo con la misma pasión con que lo hizo el niño que fui. Todo con (?).

Para finalizar esta simple entrada, transcribo y comparto dos de las fábulas de este libro. La ilustración de la tapa es la misma del primero de ellos: El oso y los dos amigos.

Bueno, y ya que estamos, aprovecho para dejar mis deseos de felices fiestas para todo aquel que pase por este blog. En la víspera de Navidad y Año Nuevo, había que ser bueno (?) y dejar algo de Cosas lindas (?).

El oso y los dos amigos

Dos amigos que paseaban por el bosque se vieron de pronto sorprendidos por un oso enorme y de temible aspecto. Uno de ellos, que era muy ágil, sólo pensó en salvarse, y corriendo a todo lo que daban sus piernas consiguió alcanzar el seguro refugio de un árbol, al cual trepó sin pensar siquiera en prestar ayuda a su amigo.

Este, al comprender que ya no podía huir, se tendió sobre el pasto y trató de quedarse inmóvil.

El oso se acercó despacio a él, dio algunas vueltas alrededor de su cabeza, lo olfateó cuidadosamente, pero como el hombre no se movía, lo creyó muerto y se marchó.

El amigo, que había presenciado toda la escena desde las ramas del árbol, se bajó entonces y, solícito, quiso ofrecerle su tardía ayuda.

Lo abrazó, contento por encontrarlo ileso, y luego, comentando la gran suerte que había tenido, le preguntó:

--Noté que el oso te confiaba un secreto. ¿Qué te dijo tan despacio?

--Me dijo --contestó el otro-- que nunca se debe confiar en quienes, llamándose amigos, nos abandonan cuando ven un peligro cercano.

Moraleja: Recuerda esta verdad que ahora te digo: quien huye y te abandona, no es tu amigo.

La zorra y el leñador

Una zorra, acosada por unos cazadores, vio a un leñador y le rogó que le permitiera esconderse en su cabaña. El hombre la hizo entrar, y no bien la zorra lo hubo hecho, llegaron los cazadores, quienes inquirieron al leñador si había visto pasar a la raposa. El hombre respondió que no, pero sólo de palabras porque, al mismo tiempo, les señalaba con la mano el lugar en que el animal se hallaba oculto.

Los cazadores no entendieron el gesto, pero en cambio dieron crédito a las palabras, de modo que se marcharon. La zorra aprovechó para huir, sin hacer comentario alguno.

--¡Detente, desagradecida! --la llamó el leñador--. ¿Así te marchas, después que te salvé la vida?

--¡Hubiera agradecido tu acción si tus gestos hubiesen estado acordes con tus palabras! --contestó la zorra mientras se alejaba.

Moraleja: No creas en quien habla bellamente, si en sus acciones no obra rectamente.


jueves, 6 de diciembre de 2007

Cosas de peloteros

"Las Pelotas es un sentimiento
no se explica, se lleva bien adentro
y por eso te sigo adonde sea
Las Pelotas hasta que me muera".
Cántico popular de la fanaticada pelotera.


Allá por el 2.002, Las Pelotas tocaba en sus conciertos canciones que en su momento eran nuevas y que formarían parte de lo que terminó siendo Esperando el milagro, disco que salió en el 2.003.

¡Qué linda época para los peloteros que fue aquella! Ir a verlos a Cemento, Hangar o al Showcenter de Haedo, junto a quinientas personas como mucho y pagando $ 8 como máximo. Y tocaban a las dos o tres de la mañana. Y eso de escuchar el recital de siempre pero con canciones nuevas que te hacían sentir que no podías esperar por tener el nuevo disco para escucharlas una y otra vez hasta romperlo de tanto darle. Era impresionante.

En ese entonces me tocó vivir dos hechos que no olvidaré:

El primero de ellos fue en un recital en el Showcenter de Haedo, al que fui con mi amigo Leo. Tuvimos que llegar varias horas antes porque así nos lo pidió un contacto (?) de mi amigo que nos haría pasar sin pagar. Lo que no sabíamos era que el pase de arriba incluiría ¡ver la prueba de sonido de Las Pelo!

Nos mirábamos y no lo podíamos creer. Las Pelotas tocando sólo para nosotros dos, que no nos animanos ni a saludarlos; nos limitamos a sentarnos y escuchar y ver. Hicieron un par de canciones nuevas, que nos hipnotizaron y nos dejaron tarareándolas largo tiempo.

El estribillo de una decía "No me digas que..." y el de la otra "Vivimos como cuervos, suspirando penas...": la primera apareció en el disco como Tomas X y la segunda como Esperando el milagro y con el estribillo distinto al que lo conocimos esa vez.

Ambas son de Germán Daffunchio. Alejandro Sokol, el cantante principal de la banda, de hecho, no estaba en la prueba de sonido. Llegó directo para el recital, como tiene que ser en su caso, por supuesto.




Magia: Corderos en la noche (1.991), primer disco de Las Pelotas.




El otro suceso que viví en torno a Las Pelotas en aquella época fue cuando empezó a rotar por la Rock and Pop Será, como adelanto de Esperando el milagro.

Me resulta imposible trasladar a este escrito la alegría, la felicidad que sentí cuando la escuché por radio por primera vez. Es que de todas las canciones nuevas que hacían en los recitales, esa era la que más me gustaba; no sabía cómo se llamaba, sólo sabía que en el estribillo decía "Será por ti será por mí, será por todo lo que fuimos...".

Y quería grabarla, pero nunca la enganchaba para hacerlo. Entonces agarré y le mandé un e-mail a Lalo Mir, que en su momento conducía en la Rock and Pop "Animal de radio", pidiéndole por favor que pasara "el nuevo tema de Las Pelotas que en el estribillo dice...". Y, cosa maravillosa (?), Lalo leyó mi e-mail, me mandó un saludo y pasó el tema, que grabé y escuché un millón de veces.

Hoy, a pesar que el último disco de Las Pelo, Basta, fue el que menos me gustó de toda la discografía de la banda y que incluso no la pasé bien en el último recital de ellos al que fui, en Ferro, atesoro y rememoro aquellos recuerdos con fuerza y me da alegría. Esa alegría que sólo Las Pelotas puede dar y que sólo un pelotero puede entender.

viernes, 30 de noviembre de 2007

Una de perros

A una cuadra de mi casa hay una casa de ventas de autos enorme; como portones tiene un enrejado inmenso y como guardianes, en las noches, dos perros. Uno es blanco y joven y el otro es negro y ya está viejito. Son perros de raza perro, como suele decirse a los que no son de alguna raza en particular, y son mis preferidos, sobre todo si vienen de la yeca.

Hace un par de meses, tuve la suerte de hacer una obra de bien con uno de esos perros.

Era de medianoche, yo volvía de ver a Almafuerte en Obras. El bondi que tomé para justo sobre los portones de reja del concesionario de autos citado, y apenas bajé vi al perro viejito meta y meta a rascar con una de sus patas el suelo de la vereda, al que podía acceder desde adentro del concesionario porque la reja del mismo tiene un espacio libre entre su inicio y el piso.

Intrigado, me acerqué un poco a ver qué pasaba y noté que el perro quería agarrar un par de huesos que estaban encrustados en un pequeño pozo de la vereda y por más que intentaba sin cesar no lo conseguía.

Sin dudarlo, saqué los huesos del agujero y se los pasé por debajo del enrejado. Enseguida, el perro comenzó a masticarlos. Y yo me fui caminando feliz hacia mi casa, por haber ayudado a un amigazo.

lunes, 26 de noviembre de 2007

Estos son los orígenes de los cielos y de la tierra

En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Y la tierra estaba sin orden y vacía. Había tinieblas sobre la faz del océano, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

Entonces dijo Dios: "Sea la luz", y fue la luz. Dios vio que la luz era buena y separó Dios la luz de las tinieblas. Dios llamó a la luz Día y a las tinieblas llamó Noche. Y fue la tarde y fue la mañana del primer día.

Entonces dijo Dios: "Haya una bóveda en medio de las aguas, para que separe las aguas de las aguas". E hizo Dios la bóveda, y separó las aguas que están debajo de la bóveda de las aguas que están sobre la bóveda. Y fue así. Dios llamó a la bóveda Cielos. Y fue la tarde y fue la mañana del segundo día.

Entonces dijo Dios: "Reúnanse las aguas que están debajo del cielo en un solo lugar, de modo que aparezca la parte seca". Y fue así. Llamó Dios a la parte seca Tierra y a la reunión de las aguas llamó Mares, y vio Dios que esto era bueno. Después dijo Dios: "Produzca la tierra hierba, plantas que den semilla y árboles frutales que den fruto, según su especie, cuya semilla esté en él, sobre la tierra". Y fue así. La tierra produjo hierba, plantas que dan semilla según su especie, árboles frutales cuya semilla está en su fruto, según su especie. Y vio Dios que esto era bueno. Y fue la tarde y fue la mañana del tercer día.




Entonces dijo Dios: "Haya lumbreras en la bóveda del cielo para distinguir el día de la noche, para servir de señales, para las estaciones y para los días y los años. Así sirvan de lumbreras para que alumbren la tierra desde la bóveda del cielo". Y fue así. E hizo Dios las dos grandes lumbreras: la lumbrera mayor para dominar en el día, y la lumbrera menor para dominar en la noche. Hizo también las estrellas. Dios las puso en la bóveda del cielo para alumbrar sobre la tierra, para dominar en el día y en la noche y para separar la luz de las tinieblas. Y vio Dios que esto era bueno. Y fue la tarde y fue la mañana del cuarto día.

Entonces dijo Dios: "Produzcan las aguas innumerables seres vivientes, y haya aves que vuelen sobre la tierra, en la bóveda del cielo". Y creó Dios los grandes animales acuáticos, todos los seres vivientes que se desplazan y que las aguas produjeron, según su especie, y toda ave alada según su especie. Vio Dios que esto era bueno y los bendijo Dios diciendo: "Sed fecundos y multiplicaos. Llenad las aguas de los mares y multiplíquense las aves en la tierra". Y fue la tarde y fue la mañana del quinto día.

Entonces dijo Dios: "Produzca la tierra seres vivientes según su especie: ganado, reptiles y animales de la tierra, según su especie". Y fue así. Hizo Dios los animales de la tierra según su especie, el ganado según su especie y los reptiles de la tierra según su especie. Y vio Dios que esto era bueno.
Entonces dijo Dios: "Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza, y tenga dominio sobre los peces del mar, las aves del cielo, el ganado, y en toda la tierra, y sobre todo animal que se desplaza sobre la tierra". Creó, pues, Dios al hombre a su imagen; a imagen de Dios lo creó; hombre y mujer los creó. Dios los bendijo y les dijo: "Sed fecundos y multiplicaos. Llenad la tierra; sojuzgadla y tened dominio sobre los peces del mar, las aves del cielo y todos los animales que se desplazan sobre la tierra". Dios dijo además: "He aquí que os he dado toda planta que da semilla que está sobre la superficie de toda la tierra, y todo árbol cuyo fruto lleva semilla; ellos os servirán de alimento. Y a todo animal de la tierra, a toda ave del cielo, y a todo animal que se desplaza sobre la tierra, en que hay vida, toda planta les servirá de alimento". Y fue así. Dios vio todo lo que había hecho, y he aquí que era muy bueno. Y fue la tarde y fue la mañana del sexto día.

Así fueron terminados los cielos y la tierra y todos sus ocupantes. El séptimo día Dios había terminado la obra que hizo, y reposó en el séptimo día de toda la obra que había hecho. Por eso Dios bendijo y santificó el séptimo día, porque en él reposó de toda su obra de creación que Dios había hecho. Estos son los orígenes de los cielos y de la tierra, cuando fueron creados.


Hasta ahí, la génesis de todo lo que existió y existe según la Biblia. Al respecto, me pregunto: ¿en serio creen eso los que lo creen? ¿Cómo es posible que sea la religión con más fieles si es más fácil convencer a alguien de que Dios no existe que de lo opuesto? ¿Creerían la mayoría de los argentinos, como lo hacemos, en Dios y la Biblia si nuestro suelo jamás hubiera sido colonizado por España, imponiéndonos su religión, entre otras cosas?

Según Karl Marx, "la religión es el opio de los pueblos".

miércoles, 14 de noviembre de 2007

Infancia, divino tesoro

"Era una manteca".
Héctor Rodolfo Veira.

"Les doy leche caliente y comemos galletas.
Es lo que todo el mundo debería hacer".
Michael Joseph Jackson.

"Nos vamos a dormir con la chimenea encendida,
los arropo y pongo algo de música".
Michael Joseph Jackson, otra vez.



Hace unos días me puse mi prenda de vestir preferida: la camiseta del Barcelona con la número 9 en la espalda, en el medio, y el apellido Kluivert, arriba.

Por la tarde, estaba en la puerta de un edificio, esperando a alguien, y de repente apareció un nene de unos ocho años, que iba junto a su mamá que llevaba una bicicleta y dos cascos. Y apenas me vio, el grumete (?) gritó: "¡La camiseta de San Lorenzo!", en cámara lenta, lleno de sorpresa, remarcando cada palabra. Y después se acercó hasta mí y me dijo con expresión de admiración: "¡La camiseta de San Lorenzo, como la que usan los jugadores de verdad!".

Sonreí, ya un poco conmovido porque a mí los nenes me emocionan, y descarté por completo decirle que en realidad era la casaca de Barcelona y no la de San Lorenzo. Luego me di vuelta y le mostré que tenía el número 9 y volvió a explotar exclamando: "¡Tiene el número!", como si nunca en su vida hubiese visto una remera de fútbol.

Intercambiamos un par de palabras más, mientras la mamá miraba sonriendo. Había que ver con cuánta dulzura miraba esa mamá a su hijo hablar conmigo.

Se pusieron los cascos y tomaron sus lugares en la bicicleta para irse, pero antes de partir el nene se volvió hacia mí y me gritó, con voz de alegría: "¡Me gusta tu camiseta!", terminando de regalarle así un hermoso momento a mi corazón.


Nota de color (?): foto de Martín Palermo de pibe.


Supongo que sentirse así por compartir algo con un nene tiene que ver con relacionarse con un ser puro, cosa que se vuelve harto complicada cuando uno se relaciona, mayormente, con pares adultos. Esto me recuerda esa frase de la canción Andá a lavártelos de Divididos que dice "lavate los deditos por el asco de crecer". Crecer es ensuciarse. Pero ese es otro tema.

Hace un tiempo, una amiga me contó una anécdota.
Ella caminaba por una vereda y se encontró a un nene jugando a que volaba, con una capa al estilo Superman. Entonces, se acercó a él y le dijo: "Mirá: yo también puedo volar", y se puso a imitarlo, haciendo que volaba. Pero el nene, serio y seguro, le contestó: "No, vos no podés volar. Yo sí", y siguió volando.
También tengo presente otra anécdota al respecto de este tema, en esta ocasión de un amigo. Pueden leerla haciendo click acá. La recomiendo mucho.

Para ultimar esta entrada --no sin antes aclarar que los epígrafes obeceden a anticiparme a los chistes y acusaciones que podrán hacerme los malvados (?) de siempre-- quiero dejar copiada la letra de la canción Crecer de Attaque 77, que si bien no es una banda que escucho, tiene este tema que me gusta y emociona:


Crecer

Papá puede arreglarlo
él siempre lo arregla todo
mamá puede traer la luna
qué bueno es que me cuiden los grandes
quiero eso, comprame
en andas llevame
historias contame

Con el tiempo yo crecí
sólo por decirlo así

Viviendo en contra del tiempo
atado a viejos recuerdos
un mundo de fantasías
no quiero crecer
ni ser responsable
seguro y estable
yo quiero juguetes
y dulces
y buenos tratos
no quiero compromisos
ni hacerme cargo

Aunque nunca sea así
aunque todo tenga un fin
Si existe un lugar así
yo quiero ir
si existe un lugar mejor
no digas que no
quiero el brillo en mis ojos hoy
igual que lo tuve ayer
yo quiero volver atrás
yo quiero volver
y no crecer más.




Odio que Riquelme juegue al fútbol con cara de culo

miércoles, 7 de noviembre de 2007

Si el tacho de basura de la cocina está tan cerca...

El lunes, cuando llegué al trabajo, sucedió algo que me indignó.

Apenas me senté en la silla, frente al escritorio, noté algo que sobresalía del pequeño tacho de basura que está a un costado de mis pies: una botella de agua de dos litros, que alguien dejó ahí vaya a saber uno por qué.

Lo que más me molestó fue que por poner la botella ahí, que no entraba, se desbordó lo que ya había en el cesto, y eso no le importó al responsable puesto que encontré la basura en el piso, alrededor del tacho.

Indignado, procedí a tirar la botella en el gran tacho de basura que está en la cocina, ubicada a menos de veinte pasos de mi escritorio, y luego junté la basura que quedó tirada alrededor de mi cesto.

Una vez que terminé con eso, mandé un e-mail a toda la empresa, que copio a continuación:

Título: Si el tacho de basura de la cocina está tan cerca...

Contenido: Al que dejó una botella de dos litros de agua en mi tacho de basura, a pesar de que no entrara: seamos buenos, por favor.

viernes, 2 de noviembre de 2007

Partidarios de la solución final

"Qué grande se ha hecho la franja
entre el arriba y abajo
Uno se van pa Miami
otros se van al carajo".
Cosas que pasan, Almafuerte.



Hace un tiempo, tuve que cumplir con una obligación laboral: participar de una cena con gente del ámbito empresarial; recepcionistas, empleados administrativos, vendedores, gerentes y dueños.

A mí no me gusta la gente que pertenece a ese rubro, del que por el momento también soy parte. De esta oración se desprende que no me gusta lo que soy, puesto que no me gusta la gente que es parte de lo que soy parte. Efectivamente, en tanto empleado de una empresa, no me gusta lo que soy. Pero ese es otro tema, distinto al que quiero referir en esta entrada.





En un momento de la conversación que tuvo lugar en dicha cena, se tocó el tema de la gente que vive en la calle, y absolutamente todos los que expresaron alguna opinión señalaron cosas como que es "una barbaridad" esa situación, puesto que "es indignante que en barrios de familia" aparezcan por ahí "linyeras que encima hacen de todo; cagan y mean y duermen sin importarles nada".

También hubo coincidencia en afirmar que ese "problema" no tendría nunca solución, ya que "no se los puede mandar a ningún lugar" y tampoco "se les puede dar vivienda porque cualquier cosa que se les de no la van a saber usar y valorar, porque no saben nada, no tienen educación, cultura ni nada".

Como conclusión, alguien dijo que lo único que se puede hacer es "agarrar una topadora y pasarlos a todos por arriba y a otra cosa". Las carcajadas que prosiguieron a esa propuesta fueron muestras de coincidencia.

Yo, mientras, entre embroncado y triste por la impotencia que sentía y por elegir callar y conservar mi trabajo sin problemas, me fui en silencio al baño, humillado y ofendido, tal como permanecí durante toda la charla.

Me cuesta comprender que la gente en situación de calle, antes que lamento o deseos de ayudarlos, despierte rechazo y odio en los otros.
Y me asusta pensar que si entre las opciones de la encuesta en tono de broma que puse --si hubiera que matarlos a todos, por quién empezaría--, hubiese puesto la opción "Pobres", muchos la hubiesen escogido, satisfechos, seguros, felices.

Odio que se despidan de mí diciéndome "cuidate"

lunes, 29 de octubre de 2007

Sobre la película La mujer rota

El sábado tenía ganas de ir al cine, a ver una película criolla, a un cine criollo. Así fue que terminé en el cine Gaumont mirando La mujer rota.

Por si el que lee no lo conoce, cuento que el cine Gaumont queda en Congreso, más precisamente en Rivadavia 1.635, y en él sólo se emiten películas nacionales. El valor de la entrada es bien gaucho, como tiene que ser: $ 4. Y si uno es nene, estudiante o jubilado, recibe un descuento especial.

La mujer rota está protagonizada por Dolores Fonzi --cosa que fue un motivo importante para verla, puesto que a mi gusto es una chica muy bonita (?)-- y Pablo Rago, eternamente en el corazón de todo televidente argentino, gracias a su inolvidable papel en Amigos son los amigos, junto a Carlín Calvo.






Si se me pide un comentario sobre lo que me pareció esta película, escrita y dirigida por Sebastián Faena, probablemente entraría en un dilema para contestar evitando usar un insulto.

Seguramente, La mujer rota es la peor película que vi en mi vida. Me refiero a películas que vi en el cine. Destronó con todo mérito, en este ranking mío, a Godzilla y a Todopoderoso.

Para muestra basta un botón (?), suele decirse: promediando la mitad de la proyección de La mujer rota, una pareja se retiró de la sala, en lugar de elegir la opción de muchos otros, que fue la de dormirse. Y cuando la película terminó, un pibe aplaudió con fervor, de modo irónico, cosa que desató la risa de muchos.

La trama de la película sería la siguiente: una mujer, Dolores Fonzi, está obsesionada con un hombre, Pablo Rago, que vive con otra mujer. Ella hará cualquier cosa por tenerlo, mientras sufre sin cesar por culpa del amor no correspondido y recuerda épocas mejores, en las que sí lo tuvo, puesto que vivieron un romance, un tanto oscuro por cierto.

Dentro de todas las cosas que me resultaron pésimas de la película, destaco dos:

Por un lado, la falta de realidad de los personajes, que parecían como estúpidos al relacionarse entre ellos; por ejemplo, podían estar mirándose media hora antes de contestarse una pregunta de lo más simple como "¿cómo te llamás?" o "¿está lloviendo hoy?". Eso me resultó exhasperante.

Por otra parte, una pretensión incomprensible de poética, o belleza y sentencias de orden filosófico quizá, en los sucesos de la historia. Así, Dolores Fonzi corría por una playa, se arrojaba sobre la arena y preguntaba "¿por qué nada se materializa?"; también hablaba sobre Pablo Rago y decía que olía "a pan" y sobre otro hombre, Juan de Benedictis, que olía "a rancio, a persona terminada"; y tampoco se privaba de suplicarle al hombre que deseaba que le permitiera "ser eficaz" o de hablar de sus más profundas cavilaciones mientras le bajaba el cierre de su pantalón.

Por supuesto, situaciones como estas, desataron carcajadas por doquier en la sala.

Días después, me quedé pensando en lo curioso que es que se hagan películas tan pero tan malas. Quiero decir: con lo que cuesta hacer una película, que no tengo idea exacta pero estimo que debe ser un gran billete, cómo se entiende que alguien haga semejante cosa. ¿No habrá un amigo que le diga al responsable algo como "mirá, no te lo tomes a mal, pero me parece que no está buena, por qué no le hacés algunos cambios para ver si queda mejor"? Encima, en Clarín le pusieron "Buena" de calificación. ¡Buena! ¡Seamos buenos, por el amor de Dios!

En fin. Un consejo de gomía: no vean La mujer rota. Mil disculpas por hacerme el Guillermo Hernández, crítico de cine. Y un gran saludo para Seba (?) Faena, Dolores Fonzi y Pablo Rago, a pesar del embole que me hicieron pasar.

viernes, 19 de octubre de 2007

Hola, soy Troy McClure, quizá me recuerden de...

Era una tarde de mucho laburo, cosa que a veces no me disgusta, ya que así el tiempo en la oficina se me pasa más rápido.

De repente sonó el teléfono, interrumpiendo lo que hacía, y por supuesto atendí como si fuera una llamada más; sin embargo, no era así la cosa.

"Hola, soy Juan Carlos Calabró, de la empresa....", se presentó el nuevo cliente.


Violeta Rivas, Antonio Carrizo y Calabró en El contra.



Enseguida, inevitablemente, supuse que se trataba de una broma y no presté mucha atención a lo que me decía; me perdí en una divagación de por qué alguien me haría ese chiste, traté de descubrir a algún amigo mío detrás de esa voz, pero no: era Juan Carlos Calabró nomás, claro que no era el querido papá de Marina (?) e Ileana (?) sino un tipo que lleva su mismo nombre.

Una vez que salí de esas cavilaciones (?), retomé como pude el hilo de la conversación y conseguí responder a sus consultas sin problemas, resistiendo la tentación de risa que me había agarrado.

Más tarde me puse a pensar que el tipo este es un capo, porque la tiene clara del nombre que lleva y lo manifiesta (?) de una, completo. Digo esto porque no es usual que alguien llame y se presente con nombre, apellido, documento y cantidad de dientes como lo hizo este hombre. Pensé incluso que hasta tal vez él mismo sea el que se divierta con su nombre y que por eso no pierde oportunidad de presentarse de ese modo, como lo hizo en esta ocasión.

Para finalizar el relato de este suceso curioso (?) que viví, refiero el primer y segundo nombre de una persona especial que tengo la suerte de conocer: Justiniano Mafaldo. El apellido no me lo acuerdo. Le dicen "Tolo" y es un gran hombre.


martes, 16 de octubre de 2007

Sobre el dilema de los fósforos

La convivencia no es cosa fácil.

Siguiendo los cánones comunes, en una primera etapa de la vida, es con la familia, haciendo de hijo y hermano. En una segunda etapa, es solo, jugándola de joven indepentiende. En una tercera, es con la familia de nuevo, aunque esta vez con la familia que uno formó, siendo padre. Y en una cuarta y final, es con los gusanos que habitan nuestra tumba.

Entre otras cosas, la convivencia genera molestias, producidas por hábitos del otro que chocan con la paz y armonía de uno.

Hoy expongo una de esas cosas que me molestan de las personas con las que convivo, que no es otra que guardar los fósforos ya usados en la caja de fósforos por usar.


Gustaf Erik Pasch, inventor del fósforo que hoy se usa.


El accionar de estos criminales es el siguiente: abren la caja de fósforos, usan uno y lo vuelven a meter en la caja. Con el paso del tiempo, se genera lo que tanto me hincha Las Pelotas: la caja de fósforos es una perfecta mezcla de fósforos usados y fósforos a usar que no genera beneficio alguno para los consumidores sino todo lo contrario.

Hay algunos que no tiran los fósforos ya usados porque pueden volverlos a usar un par de veces más, valiéndose, por ejemplo, de la llama del calefón que anda por ahí para encenderlos. Bien por ellos, que los he visto actuar, y que demuestran un elogiable ahorro de recursos. Ahora bien, no es este el caso de los sujetos con los que convivo, que vuelven a meter los fósforos ya usados adentro de la caja no por ahorro sino porque les resulta más cómodo eso que tirarlos a la basura.

En más de una oportunidad dediqué un buen rato a separar de la caja de fósforos los quemados para luego arrojarlos a la basura, resignado a que la actitud de las personas de las que me quejo no cambiará jamás. Algunos de ellos, cuando discutimos de esto, me dicen maniático, mientras sonríen. Que mi tercer nombre sea Manía pareciera darles la razón.

Vale aclarar, ya que se mencionó mi particular tercer nombre, que mis padres quisieron ponerme Patrick Stephan María, pero un error del encargado del despacho civil me dejó como Patrick Stephan Manía. Cosas que pasan.

Maude Flanders

Hoy se da por terminada la encuesta de El blog de P. S. Kluivert que preguntaba a quién resucitaría si pudiera:

Maude Flanders fue la elegida por la gente (?), con el 31% de los votos. En segundo y tercer lugar quedaron Roberto Galán y Juan Domingo Perón, con la misma cantidad de electores: 18%.



Maude, un bombón según Homero, responsable de su muerte.



En la cuarta ubicación quedó Jesucristo, con el 13%. Y en la quinta y sexta Cris Miró y Marc Vivien Foé, con el 9% cada uno.

Párrafo aparte amerita lo que sucedió con el doctor Mario Socolinsky, que no recibió voto alguno. Un duro golpe para la memoria de este gran hombre, que educó a los padres sin cesar, a través de la pantalla amiga, en la tarea de cómo llevar por el camino de la buena salud a sus hijos, de la mano del cuidado de sus pitinas y chochinas y de la necesaria y fundamental prevención.

Queda hecha la invitación a sufragar (?) en la nueva encuesta, que ya está on line.



lunes, 8 de octubre de 2007

La mayor aniquilación de personas de la historia de la humanidad

"Y nos dijeron cerrá los ojos, dame la tierra, tomá la Biblia".
Huelga de amores, Divididos.

"Madre Tierra, Padre Sol, ni Demonio, ni Señor".
Sentir indiano, Almafuerte.

"Indio quedó solito, indio ser muy buenito, indio querer tan solo estar en paz".
Juguemos a los indios, Xuxa.



Después de leer una entrada en el blog del Bambi, y pensando en el tema del descubrimiento y la conquista de América por parte de los españoles, recordé unos datos que leí en La conquista de América. El problema del otro, del búlgaro Tzvetan Todorov.

La conquista de América representó, entre otras cosas, la mayor aniquilación de personas de la historia de la humanidad.

Hacia el año 1.500 la población de América se estimaba en ochenta millones. Cincuenta años después, a mitad de ese siglo, la población quedó en diez millones. Setenta millones de muertes. El mayor genocidio que jamás se haya cometido. Probablemente, según Todorov, jamás se vuelva a cometer uno semejante.

Entre las principales causas de muerte, Todorov destaca tres: asesinato directo, malos tratos y enfermedades.

Las dos primeras causas obedecen a lo mismo: resistencia a someterse a la voluntad de los españoles, que proponían entregar la religión cristiana y llevarse el oro y las distintas riquezas que encontraban en la tierra que descubrieron.

La mayor parte de los muertos por malos tratos pertenecieron a los que fueron obligados a trabajar en minas, que tenían una expectativa de vida de veinticinco años.

Promediando la mitad de la lectura de este libro, entendí por qué estaba dedicado a "una mujer maya que murió devorada por perros". Ella es América, los perros son los españoles.






Algo recurrente que me sucede cuando leo o escucho cosas referentes a este tema es indignarme por la versión del suceso que me dieron en el colegio: Colón y los suyos nos descubrieron, nos sacaron de la vida de salvajes que llevábamos y nos encaminaron hacia el buen mundo, dándonos cultura, lengua, religión. Civilizándonos.

Tengo entendido que ahora, en la escuela, la historia se cuenta de otro modo, lejos del que me tocó aprender a mí y cerca del que relata Todorov, valiéndose de cartas y testimonios de los protagonistas, como Colón, Cortés, los reyes de España y distintos evangelizadores de la época, como Las Casas.

Para finalizar, dejo transcripta la letra de la canción de Hermética que me acercó por primera vez a la verdad de esta milanesa:


La revancha de América

Pueblos nativos del suelo mío
fueron saqueados y sometidos
por la siniestra garra de la Madre Perra
que orgullosa festeja quinientos años
de haber llegado con sus caravelas
a succionarnos, a imponernos fe
estrechos dogmas de su infernal sed
por sus caminos no quiero andar
avergonzado me quiero zafar

Estos zarpados revientan el planeta
al ver sus reinos en la nada ahogarse
obsérvalos ostentando riquezas
que profamaron de la tierra del sol
esclavizando, civilizando

De ese castigo debes zafar
tomá revancha, América.




jueves, 4 de octubre de 2007

El que se pone una foto en el messenger con su novia es un puto

Ampliación: todo hombre que por definición tenga por messenger una foto con su novia no es un macho hecho y derecho, sino un pollerudo, puesto que es incomprensible que prefiera eso durante un lapso de tiempo extenso a mostrar una foto de Hristo Stoichkov, James Hetfield, Marlon Brandon, Luciana Salazar o Juan Domingo Perón.

Excepción: los que lo hacen ocasionalmente, cosa que comprende, a lo sumo y como máximo, dos días consecutivos. Podría entenderse, en tal caso, que la actitud obedece a que se intenta enmendar un error o homenajear a la pareja luego de que la misma le haya hecho un favor considerable, como una buena cena o prestarle una cuantiosa suma de dinero.

lunes, 1 de octubre de 2007

"Más exclusivo que la concha de tu tía"

¡Exclusivo! Entrevista con José Luis Félix Chilavert.
El blog de P. S. Kluivert concretó una charla íntima con uno de los máximos referentes de la historia de nuestro país en materia de portería: José Luis Félix Chilavert. Así es: lo invitamos a dialogar con nosotros, en un bar, y aceptó de buen gusto.
A continuación, un diálogo sin desperdicio con este ex futbolista y, posiblemente, futuro dirigente.


En negrita: P. S. Kluivert.
Fuente regular: José Luis Félix Chilavert.



Chilavert, en primer lugar quería agradecerle esta entrevista, sobre todo teniendo en cuenta que somos un medio independiente, recién iniciado. De hecho, soy yo solo.

Yo no concedo entrevistas en función del poder que tenga el medio que me la solicita. No manejo esos códigos propios de mentirosos y chupamedias.

Ah, ejemplar. ¿Entonces no hay criterio alguno, le da entrevistas a todos los que le piden?

No. Mi criterio es tirar la moneda. Me piden una entrevista y tiro una moneda: si sale Cara, la hago; si sale Seca, que se chupen una pija.

Interesante método.

No tan interesante como la fractura de fémur que le voy a meter al viejo puto del mozo si no me trae la napolitana con fritas, la Coca Cola, el café con leche, el alfajor y la porción de pastrola que le pedí hace una hora, la puta madre.

Sí, suele demorar en llegar el pedido en este bar. ¿Quiere que reclame?

Hacé lo que quieras.

Lo noto de mal humor, ¿puede ser?

Soy muy feliz.

Ah, es feliz. Me arruinó una de las preguntas del final, que copié de Luis Majul.

Jódase, negro. Y no imite a imbéciles, a ver si todavía lo logra.

Cambiando de tema, José Luis, ¿es cierto que piensa presentarse como candidato para presidente de Vélez Sársfield?

Sí, así es. Ya es hora de que se termine con el verso de Gámez y toda esa mafia. La gente de Liniers ha vivido engañada por ese ferretero y barrabrava. Y estoy convencido que no hay mejor opción que yo para darle a Vélez lo que se merece.

¿Y cuáles son sus propuestas, por qué la gente habría de elegirlo?
Mi propuesta principal es poner una bomba en la platea local, en algún partido que Vélez dispute en su cancha. Preferentemente en un partido importante, así hay más gente. Estuve pensando en que lo mejor sería hacerlo en el entretiempo, cuando estén comiendo hamburguesas... ¡Boom! ¡Adiós, plateístas, a joder a otro lado, si es que existe otro lado! La platea de Vélez es lo peor que tiene la institución, el principal motivo de todas sus penurias. Y eso es lo que Gámez no entiende. Apenas haga volvar de un saque a esa platea, el equipo vuelve a ser ese que ganó todo, y hasta San Lorenzo va a hacer lo imposible por que lo aceptemos como nuestro clásico.

¿Y con la popular está todo bien?

Por supuesto. ¿Quién podría enojarse con un grupo de tipos que se hacen llamar "La pandilla"? No tiene sentido.

Ahí llega el pedido.

Al fin, carajo.

¿Y en lo inmediato, tiene algún otro proyecto además de su candidatura presidencial ?

Sí: comerme la napolitana con fritas, tomarme la Coca Cola, después bajarme el café con leche, el alfajor y la porción de pastrola y, finalmente, irme a la mierda.

Me hace reír, José Luis.

No es un chiste. Yo no soy un payaso. A mí nadie me paga por hacer reír. Ahora voy a comer. Y no me gusta que me molesten mientras lo hago.

Entiendo. Me retiro, entonces. Muchas gracias por esta entrevista exclusiva, otra vez.

Sí, más exclusivo que la concha de tu tía. No, no. No se apichone, cobarde. Pídase algo para morfar y hágame compañía. Eso sí, la entrevista ya terminó.


Chilavert, retirándose ovacionado del bar.




Muchas gracias al Bar de Manolo, Paraguay 25.912, Capital Federal.



Ping Pong con Chilavert


¿Un lugar?
El baño.

¿Un color?
El amarillo.

¿Una persona?
Yo.

¿Un futbolista?
Víctor Müller

¿Una frase?
Chupame la pija.

martes, 25 de septiembre de 2007

Elige tu propia aventura

Estaba por contar una anécdota sencilla que me ocurrió hace unos días y se me ocurrieron dos formas de agregarle una continuación para que tuviera algo de emoción y aventura.

Como no me decidía por ninguna de las dos invenciones, me dije que estaría bueno ponerlas a ambas. Y al preguntarme cómo hacerlo, pensé en la opción que vi en Bajate del auto, pelotudo y en El cliente nunca tiene la razón: hacer un Elige tu propia aventura.

Así fue cómo hice Paseando al perro, que está en la entrada que sigue a esta.

Paseando al perro

Es de noche y, como siempre, sacás a pasear al perro para que haga sus necesidades. Una vez que llegan a la esquina y él comienza a hacer lo segundo, sacás la bolsita del bolsillo de tu pantalón y te disponés a juntar sus abundantes excrementos.

En ese entonces, pasa a tu lado una pareja de ancianos, tomados de las manos.

-- ¡Ah, pero muy bien! -- exclama él.
-- Ese sí es el futuro de nuestro país -- agrega ella, con entusiasmo.


Si entendés esos comentarios como un elogio a tu ciudadanía de bien y simpatizás con los ancianos e iniciás una charla amable con ellos, hacé click acá.

Si entendés esos comentarios como una ironía que significa, en realidad, que el futuro del país es dedicarse a juntar mierda y que vos, como joven de esta tierra, sos un paradigma de eso, y te enojás con los ancianos y decidís discutir con ellos, hacé click acá.

Si por toda respuesta a esos comentarios hacés una sonrisa y seguís con lo tuyo, hacé click acá.



viernes, 21 de septiembre de 2007

Erica García quiere mirarte mientras te masturbás

"Con la leche cultivada me hice una malteada por tu amor".
Juego trágico, Náspid Franzapán.



Hace poco me bajé el único disco de Erica García que no había escuchado: El cerebro, que es su primer álbum. Rápidamente, se convirtió en mi disco preferido de los tres que hizo, aunque eso no signifique que los otros dos, La bestia y Amorama, no me gusten. Marco una preferencia, simplemente.

Hubo una canción, Tu ala, que me llamó mucho la atención de El cerebro. A continuación, la letra de la misma:



Tu ala

Quiero mirar
cuando frotás tu cabeza
quiero mirar
Quiero saber
qué pasa por tu cabeza
cuando te tocás

Tal vez sea yo
espero que no
vuela libre tu ala

Lago lactal
que te ilumina las piernas
agonizás
Quiero saber
qué hay en tus pensamientos
cuando acabás

Tal vez sea yo
espero que no
vuela libre tu ala

No quiero adueñarme
ni ser tu prisión
demasiado mundo para prohibírtelo



Desde hace varios años, Erica García vive en Estados Unidos, creo que en Los Ángeles. Allá hizo dos discos, pero no como Erica García, sino bajo su nuevo nombre artístico: Mountain Party. Según tengo entendido, también cambió la música que hace; del rock pasó a la música electrónica, sin letras, sólo melodías, pero no estoy muy seguro de ello, ya que no pude conseguir esos discos.

Me apena pensar que una artista que me gusta tanto no vaya a ser más lo que fue. Aunque no pierdo las esperanzas de que algún día le pinte la vuelta, no como Montaña de Fiesta sino como Erica García. Y si eso no sucede, son cosas que pasan. Así es la vida.

Para bajarse la discografía de Erica García, se puede pasar por lo de Gustavito, haciendo click acá.






En la imagen, sacada de acá, se puede ver a Erica García.


miércoles, 19 de septiembre de 2007

Holanda, un saludo con onda para algunos, una casa Para Mí

"Una vez más voy con la verdad para adelante".
Triunfo, Almafuerte.


Se me ocurre que la mejor manera de principiar algo como esto que es un blog es mediante una presentación. Por eso escribo este prólogo.

El contenido de esta bitácora será tan diverso, heroico, augusto y voluptuoso que ni al mismísimo Marcelo Hugo Tinelli le resultaría posible hacer una justa descripción del mismo.

Teniendo en cuenta ese dilema, que me impide hacer un prefacio del contenido del sitio, me dispongo entonces a hacer algo diferente aunque no por eso menos relevante: contar el por qué, la génesis, de este proyecto, forjado por dos motivaciones.

La primera fue el reciente cierre de Las anacletas, blog de Abril Sosa, líder de Cuentos borgeanos y ex baterista de Catupecu Machu, que dejó un vacío indecible en Internet y en mi corazón.

Parte de este proyecto está motivado por intentar llenar aunque sea una milésima porción del océano abierto en la web a partir del adiós de Las anacletas. Apenas se cerró, supe que era necesario que surja un reemplazo, lo sentí como algo urgente, que alguien tenía que hacer antes de que fuese demasiado tarde y Blogger muriese de pena. Como no vi postulante alguno, acá estoy, plantándome ante el desafío.

La segunda motivación, pero no por eso menos importante que la primera, es que estoy muy al pedo en la oficina en la que trabajo.

Finalizado ya el extenso relato de la etimología de este proyecto, no me queda más que manifestar mi deseo de que El blog de Patrick Stephan Kluivert sea motivo de disfrute para el que lo lea.